Con un diseño arquitectónico atractivo y acogedor, el Sesc Guarulhos celebra seis años de funcionamiento y supera los tres millones de visitas. Este proyecto de Dal Pian Arquitetos se destaca por su capacidad de integrar a la comunidad y generar una conexión con el entorno.
En el año 2025, la unidad conmemora su sexto aniversario consolidándose como un punto de referencia en cultura, deportes, salud y ocio en Guarulhos, la segunda ciudad más grande del estado de São Paulo, Brasil.
Además, su impacto se extiende a los habitantes de la zona norte de la capital paulista, ampliando su alcance regional. Con 34.200 m² de superficie, el espacio se concibe como un ambiente democrático y accesible, promoviendo la interacción y socialización entre los visitantes.
“La idea de crear un edificio extrovertido, atravesado por la mirada, donde se puedan percibir todas las actividades en curso, fue la esencia del proyecto”, explica Renato Dal Pian, socio fundador del estudio autor del diseño.


Distribuido en tres niveles, el complejo cuenta con un teatro con capacidad para 349 espectadores, un gimnasio que alberga hasta 3.600 personas y un centro acuático. También incluye espacios dedicados a la música y la educación ambiental, una biblioteca, un gimnasio, salas de exposición, áreas recreativas para niños y adolescentes, una cafetería y sectores de servicios.
Con capacidad para recibir hasta 4.000 visitantes diarios, la unidad ha registrado más de 3 millones de visitas y superado las 400.000 inscripciones en sus primeros cinco años. Ha sido sede de una variada programación de conciertos, espectáculos, cursos, talleres y experiencias interactivas, reafirmando su papel como un centro de intercambio cultural y social.
Desde su concepción arquitectónica, el edificio establece un diálogo con el paisaje circundante, heterogéneo y en ocasiones fragmentado. A través de soluciones espaciales pensadas para sus funciones específicas, el proyecto no solo refuerza el papel del Sesc como comunicador social y promotor cultural, sino que también contribuye a la cohesión del entorno urbano. En su interior, los espacios se organizan alrededor de una plaza central que canaliza los flujos externos y actúa como eje estructurador de las actividades del complejo.


Este espacio convocante, caracterizado por su transparencia y permeabilidad visual, permite entrever las distintas actividades desarrolladas en el interior y fusiona el paisaje circundante con los ambientes internos. Un sistema de cubierta compuesto por rejillas metálicas, vidrio, extractores de aire y lamas horizontales perforadas de aluminio regula la entrada de luz natural, optimiza la ventilación y proporciona protección solar, logrando un equilibrio entre estética y eficiencia.
“El espacio del Sesc también permitió intervenciones artísticas muy interesantes”, señala Lilian Dal Pian, socia fundadora del Estudio de arquitectura autor de la obra. En el hall de entrada, la instalación “Já estava assim quando cheguei”, de Carlito Carvalhosa, exhibe un imponente bloque de yeso de más de dos toneladas. En el segundo piso, la obra “Cores Polvo”, de Adriana Varejão, ocupa una de las paredes, mientras que el gimnasio cuenta con el mural “Paisagem Desaguando”, de Janaina Tschäpe. En el exterior, dos esculturas de la serie “Carreteis”, de Eduardo Frota, complementan el conjunto artístico integrado al proyecto del Sesc Guarulhos.



