El desafío de las empresas fabricantes de maquinaria y equipos para la construcción radica en centralizar la gestión de flotas multimarca en una plataforma integradora. Se le llama internet de las cosas, en inglés Internet of Things (IoT), a la posibilidad de interconexión y transmisión de datos.
Los aparatos eléctricos y electrónicos junto con los dispositivos digitales con los cuales convivimos, cuentan con circuitos y sensores que les permiten ejecutar programas, recolectar y compartir datos con la Internet sin la intervención de las personas.
Cuando los equipos de construcción y minería permanecen conectados a Internet, enviando información de localización, condiciones de trabajo y funcionamiento, es posible transformar esos datos en información vital para el control de la productividad y los costos dentro de una obra.
Actualmente existen máquinas de diversas marcas y modelos capaces de ofrecer su propio sistema de monitoreo, entendiendo a las máquinas como un fin, formando parte de una operación para finalizar un determinado proyecto.
“Si es imposible centralizar la gestión de las máquinas, ya que existe una miscelánea de fabricantes con sus propios sistemas de monitoreo, es fundamental buscar una plataforma de gestión capaz de captar la información de localización, salud y funcionamiento de todos los fabricantes”, destaca Vinicius Callegari, cofundador de la empresa GaussFleet.
De acuerdo a este especialista, es difícil para una empresa constructora contar con solo una marca de equipos en sus obras. Aunque eso ocurriera y lograra tener el sistema de monitoreo del fabricante para toda la flota, aun así, sufriría con una plataforma que aprecia a la máquina como fin y no posee el contexto operativo del avance de la obra, acuerdos de trabajo y medición del contrato.
“Algunos parámetros a evaluarse son disponibilidad y utilización automáticas, sin interacción humana; odómetro y horómetro 100% digital y automático, que incluso, puede ser integrado al sistema de mantenimiento; avance de la obra y cuánto debe pagar el cliente; posibilidad de reubicar máquinas infrautilizadas en otros frentes; y control sobre el proceso de CDM”, enumera Callegari.
Por su parte, Jaeder Carriel, coordinador de flota de Camargo Correa Infra, contó en una charla cómo la solución utilizada por la empresa constructora para el monitoreo y gestión de la flota, con el uso de telemetría, garantizó la disponibilidad física de los equipos en campo, además del control de producción, reducción de consumo y registro automático de horas trabajadas.
La citada constructora posee 242 equipos monitoreados y 480 operadores capacitados para interactuar con esta tecnología. “Al principio de cada turno, se efectúa el check list de seguridad y mantenimiento, con status de los equipos en tiempo real sobre información que posibilita una gestión mejorada y precisa”, describe.
Jaeder dice que antes de la implantación del monitoreo, la compañía constructora no tenía rastreabilidad de los equipos y faltaba integración entre planificación y ejecución, además de la dificultad de obtener información en tiempo hábil para la toma de decisiones. “Hoy, la interconexión digital de los equipos con la sala de control fue capaz de reducir hasta el 3% en el consumo de combustible, mejorar el 5% la disponibilidad mecánica y la tasa de utilización de las máquinas”, evalúa.
El experto observa, incluso, un cambio en la cultura de los operadores, con mejora en la calidad de la información transmitida. A partir del momento en que los profesionales saben que son monitoreados, adoptan un estándar de comportamiento compatible con lo establecido por las normas de trabajo de la empresa.