Vinculación Cubierta-Mampostería
En la edición número 77 de Revista IE, medio técnico de difusión de nuestra Asociación de Ingenieros Estructurales (AIE), se publica el artículo titulado «Revisión de Aspectos Estructurales de las Uniones Cubierta-Mampostería». El escrito presenta autoría de Sabrina Bisogno Eyler y María Inés Montanaro, ingeniera civil y magíster en ingeniería estructural, respectivamente, ambas de la Facultad de Ingeniería de la Universidad Nacional del Centro de la Provincia de Buenos Aires. En los últimos años, en el centro de la provincia de Buenos Aires, se han registrado numerosos casos de voladuras de techos completos de viviendas durante temporales. Un factor común en estos incidentes ha sido la falla en la unión de la correa a la mampostería, mientras que las fallas en los elementos de fijación de chapas o la flexión de las correas han sido menos frecuentes. Estos eventos ocurrieron a velocidades de viento que, aunque altas, fueron menores a las establecidas como máximas en el reglamento CIRSOC 102/2005. La falla de la conexión entre la correa y la mampostería durante tormentas o vientos fuertes provoca significativos daños económicos a las viviendas, afectando no solo la estructura del techo sino también los bienes interiores debido a la exposición al viento y la lluvia, además de los costos asociados al desalojo temporal. Es común en la construcción de viviendas y otros edificios que las conexiones entre el techo y la pared no siempre sean calculadas para resistir las cargas de succión durante las etapas de construcción y uso. Un caso particular analizado corresponde a una obra en construcción donde el techo ya había sido colocado, pero las aberturas aún no habían sido instaladas. En años recientes, es habitual colocar puertas y ventanas casi al finalizar la obra, lo cual deja a los edificios proyectados como cerrados, parcialmente expuestos durante la construcción, alterando así las cargas de viento reales. Si la vivienda hubiera estado completamente cerrada durante el temporal, probablemente no habría sufrido los mismos efectos de succión. Este artículo enfatiza la importancia de las conexiones adecuadas entre techo y pared para mitigar daños estructurales durante vientos fuertes, ya que estas conexiones proporcionan una ruta continua de transferencia de carga desde el techo hasta los cimientos. Cualquier discontinuidad en esta trayectoria de carga compromete el desempeño estructural, reduciendo la resistencia frente a cargas de viento y aumentando el riesgo de daños más graves a otros componentes estructurales e incluso la posibilidad de una falla total del sistema estructural. La publicación recopila estudios y artículos que abordan diversos aspectos, como las velocidades del viento, tipos de uniones, especificaciones reglamentarias, modificaciones de códigos internacionales, así como requisitos técnicos en licitaciones y aspectos de diseño y construcción en Argentina. El objetivo es discutir la necesidad de investigar y definir cuáles son los métodos más seguros actualmente para reforzar las construcciones existentes y asegurar la resistencia de las uniones cubierta-mampostería en futuras construcciones. A través de esta enumeración y análisis, se proponen alternativas de mejora que buscan fortalecer la seguridad y durabilidad de las edificaciones frente a condiciones climáticas adversas. Es posible leer el artículo completo ingresando en: